Somos el chocolate del fin del mundo, nuestro sabor evoca a la Patagonia. Somos una empresa joven, innovadora, con una línea fresca, lúdica, con diseños alusivos a lo regional, con la utilización de la lenga, la cultura ancestral, los animales nativos, nuestros símbolos y espacios. Seleccionamos frutos nativos de los huertos de la Patagonia, entre ellos, calafate, grosella, zarzaparrila, ruibarbo, entre otros y nos ponemos a su disposición por estacionalidad. Nos distingue tanto el sabor de nuestros chocolates como el diseño que hemos querido imprimir en nuestra marca y estamos seguras que serán muy bienvenidos entre los turistas y la comunidad local.

Hoy estamos deleitándonos con las bondades del cacao colombiano cosechado en granjas artesanales de las regiones de Huila, Tumaco, Arauco y Santander.  Reconocidos internacionalmente por producir un cacao fino de aroma, con notas frutales, florales y por su suavidad logrando un punto justo de acidez y equilibrio. Esto sumado a la producción de baja escala y tratamiento artesanal resulta finalmente un chocolate de gran sabor y saludable. Rescatamos y relevamos el proceso artesanal en la producción de nuestros chocolates y le damos el lugar protagonista que merece.

Nuestros chocolates son el reflejo del trabajo en conjunto que a diario realizamos los creadores y el equipo de trabajo de chocolates 53 Sur.

Ningún detalle en la cadena de creación es al azar. Nos gusta el trabajo bien realizado y somos fans de lo hecho a mano y de lo artesanal, donde cada etapa del proceso es clave en el resultado final esperado y donde cada paso es llevado a cabo de manera dedicada, pensada y cuidada.

Nuestros chocolates están desarrollados con el mejor cacao seleccionado 100 por ciento de origen.